Oficios del subsuelo: El votante

Ser votante, que cogorza de poder señores. Decidir el futuro de un pueblo, un país o del mundo entero a golpe de papeleta. Si dios existiera, seguro que sería uno de esos individuos extraños, que llega media hora antes al colegio electoral, con el dni en la mano, reivindicando su derecho a voto. Una papeleta puede parecer poco menos que un kleneex en manos inexpertas, pero en manos de un votante se convierte en el santo Grial. Mover la patria a tu antojo, eso es ser votante. Si señor. Decidir la dirección ideológica del mundo según el clima! ¿Que llueve? votas a la derecha. ¿Que hace sol? Votas a la izquierda. ¿Que sale un arco iris? votas al centro. ¿Que hay niebla? votas a la diagonal.
Si yo fuera votante, impugnaría la vejez. Votaría y votaría hasta que la juventud obtuviera una mayoría absoluta. No se pueden imaginar la envidia que me dan esos malditos votantes. Vender tu voto al candidato más generoso (con los sobornos) eso es el climax. Ser votante, y encima corrupto, ¿ pueden imaginar algo mejor? Solo se me ocurre ser vagabundo! No, no rían, no lo digo con ironía alguna, y me ofende que puedan pensar lo contrario El vagabundo es el único ser capaz de sacarle incluso más provecho a una papeleta. Ya que éste, de bien seguro la guardaría a buen recaudo esperando pacientemente el día en que le falte papel higiénico.

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