Lo especial

Les dije a los organizadores de este concurso de talentos que eso de que yo soy especial, eso de que yo soy único, era más algo que me decía mi madre de pequeño para disimular mi corta estatura que algo verdaderamente sobrenatural. Les dije a los organizadores de esta competición para gente con poderes sobrehumanos que lo que yo tenía era miopía, y no visión nocturna. Pero supongo que no me expliqué con suficiente claridad. Lo supongo bastante. Porque ahora estoy aquí, encerrado en una nave industrial que hace las veces de coto de caza, rodeado de gente que levita y escupe fuego por la boca. Y pretenden  que nos demos  de tortazos hasta que solo quede uno en pie, hasta que una habilidad especial y/o de circo prevalezca por encima de las demás

Y que sí, que lo confieso. A veces, estando muy borracho, he dicho en voz alta que la oscuridad me ha conferido una claridad sin igual. Que de tanto arder he quedado iluminado. Pero claro, explícale tú a un tipo que puede distorsionar el tiempo y contorsionar el espacio con tan solo fruncir el ceño que la magia de la vida está en la sonrisa de los niños. Acércate tú a una tipa que puede provocar terremotos al chasquear los dedos y dile que no hay mayor sacudida que la provoca el amor no correspondido.